Son muchos los que por desgracia no tienen empleo. Hace 15 años, no hay que ir más atrás en el tiempo, la imagen del desempleado era la de una persona sentada en el banco de un parque o en un bar subrrayando anuncios por palabras. Esa imagen, gracias a Internet, prácticamente ha desaparecido. Está claro que el objetivo fundamental de cualquier desempleado es buscar de manera intensa un puesto de trabajo. Pero parte de ese tiempo, y mientras no se consigue este objetivo, debería estar dedicado a la formación. Aquí siempre nos hemos encontrado con un obstáculo casi insalvable para muchos, y es el tener que asumir el coste del Máster o curso de formación. Tenemos la mala costumbre de creer que toda aquella formación que no se pueda demostrar a través de un diploma, no sirve. Nos equivocamos al pensar de esta manera, y muchos no son conscientes de las posibilidades de aprendizaje que nos da la red.
A lo largo de mi vida profesional, me he encontrado con Directores Generales con varios Máster en su poder que eran incapaces de generar una diapositiva en PowerPoint. A mi modo de ver, me resultaba como poco incomprensible, no podía entenderlo. Cuando les preguntaba el motivo, la respuesta siempre era la misma: para eso estaban mis subordinados. Aunque hable en pasado, esto sigue ocurriendo. Otro de los motivos que me daban es que no tenían tiempo para realizar cursos de este tipo, y si tenían que elegir entre un Máster de una reconocida escuela de negocios y un cursillo sobre un paquete de aplicaciones como Office, lo tenían diametralmente claro, el Máster sin lugar a dudas.
Hace años trabajé en una agencia de publicidad en Las Palmas de Gran Canaria donde unos de los diseñadores gráficos contratados solo tenía en su haber el título de graduado escolar. Jamás, a lo largo de los 25 años cumplidos que llevo trabajando, he visto a nadie manejar una aplicación tan compleja como Photoshop con tanta destreza y soltura como él. Debo aclarar que en estos 25 años, he trabajado con unos 50 diseñadores. Lo último que sé de esta persona, es que llegó a trabajar en una de las agencias más importantes del País, concretamente en su sede central en Barcelona.
Volviendo al principio, y sin desviarme más del tema, soy un firme convencido de la autoformación a través de Internet utilizando los cientos de miles de tutoriales que existen. Nos sorprenderíamos, si investigamos un poco, de los tutoriales que hay en la red para prácticamente todas las profesiones. También es otra forma de descubrir la solidaridad (por llamarlo de alguna manera) que hay en la red por parte de mucha gente que desinteresadamente realizan y suben estos tutoriales. Algunos, por poco que nos fijemos, llevan mucho tiempo realizarlos. A todos ellos, un millón de gracias.
Por todo lo comentado, a todos los que estéis trabajando y a los que, por desgracia, no tengáis trabajo, os recomiendo que investiguéis en la red. Que es una forma de aprender tan lícita como la de cualquier Máster. Es una manera de aprovechar el tiempo libre que podamos tener, para adquirir conocimientos que nos vendrán genial en la práctica de cualquier actividad profesional. Con una conexión a Internet y un ordenador, bajo mi punto de vista, ya no hay disculpa que valga.
Para terminar, y quiero que quede muy claro, no tengo absolutamente nada en contra de los Máster. Pero cuando no hay posibilidad, esta opción es la mejor.
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